miércoles, 8 de septiembre de 2010

Óleo de mujer con sombrero

Hoy me he acordado de esta canción (tú sabes bien por qué) que habla de dejar pasar oportunidades, de permitir que el miedo te bloquee, de actuar guiado por la cobardía o la excesiva prudencia... y por eso, vivir un poquito menos, tal vez... a mí, al menos, me habla de estas cosas... de nuevo Silvio, con sus versos perfectos, su palabra precisa, su guitarra hechicera...

"Una mujer se ha perdido
conocer el delirio y el polvo...
se ha perdido esta bella locura,
su breve cintura debajo de mí.
Se ha perdido mi forma de amar,
se ha perdido mi huella en su mar.
Veo una luz que vacila
y promete dejarnos a oscuras.
Veo un perro ladrando a la luna
con otra figura que recuerda a tí.
Veo más, veo que no me halló...
veo más, veo que se perdió.
Una mujer innombrable
huye como una gaviota
y yo rápido seco mis botas,
blasfemo una nota y apago el reloj.
Qué me tenga cuidado el amor,
que le puedo cantar su canción.
La cobardía es asunto
de los hombres, no de los amantes.
Los amores cobardes no llegan a amores
ni a historias, se quedan allí.
Ni el recuerdo los puede salvar,
ni el mejor orador conjugar.
Una mujer con sombrero,
como un cuadro del viejo Chagall,
corrompiéndose al centro del miedo
y yo, que no soy bueno, me puse a llorar.
Pero entonces lloraba por mí,
y ahora lloro por verla morir
."
(Silvio Rodríguez)